Se habla de la mujer, se saludan, hacen regalos, se recuerdan a mujeres luchadoras en la historia. Pero debemos tener en cuenta que el 8 de marzo debe ser todos los días del año y no un solo día.
Desde mi profesión como abogada trato de hacerlo todos los días bregando porque las mujeres se den cuenta de que tienen derechos y que los deben reclamar y no se dejen subestimar por jueces y juezas machistas.
Nuestras leyes están, pero mientras la mente de los jueces no cambie, seguiremos en un larga batalla con la justicia patriarcal.
El verdadero paso será alimentar la cultura del respeto, de la equidad de género e igualdad de derechos, de acelerar los tiempos de la justicia y por sobre todo que no les tiemble la mano a la hora de firmar sentencias.
Felicidades a todas esas mujeres que combaten los grandes obstáculos de la vida y se levantan más fuertes que antes.
A la mujer que crea, ama y sostiene a otras mujeres.
Dra. Silvina Bentivegna
