Una joven profesional se vio obligada en concurrir a la Unidad Especializada en Violencia Doméstica y Género, (UEVDG) a solicitar ayuda por una situación de violencia que tuvo con su pareja de un año y medio.
El denunciado empleando violencia psicológica la humilló, denigró, destrató y la echó de la casa en la cual convivían y cuyo alquiler está a nombre de la víctima, la presionó por la parte económica amenazando que no le permitiría sacar sus pertenencias de la casa, sabiendo éste perfectamente que la mujer estaba sola y vulnerada en plena noche.
” Acudí a la unidad de violencia porque supuse que ahí me iban a cuidar pero me sentí destratada y maltratada, la revictimización que tuve que pasar no se lo deseo a nadie ya que me tuvieron ahí más de cuatro horas para que el Cabo A me tomara la declaración, al finalizar de declarar no me entregan ninguna copia de mi denuncia. El viernes por la mañana como no tenía ninguna novedad decidí ir nuevamente a la unidad y allí me recibe la Cabo M, le cuento lo que me estaba pasando y me entero que había una resolución lo que ellos dicen una Prestación de Garantía, y en ese mismo momento la Cabo lo llama al denunciado para anoticiarlo de tal resolución y preguntarle cuando podía ir a firmar la misma, contestando él que en una hora”.
” En un momento me dice la Cabo M ni móvil tengo así que si no viene y hay que ir a buscarlo no sé que vamos a hacer. Yo me retiré por esa hora para no cruzármelo. Como las horas pasaban y nadie me llamaba decidí ir a la oficina de la Fiscalía, una vez allí cuento lo que me estaba pasando a la funcionaria y cuando se fijó en la computadora se dan cuenta que jamás habían ingresado mi denuncia al sistema por consiguiente no habían enterado al fiscal”.