Te fuiste en el mes que tus lapachos florecen pero QUEDASTE EN MI CORAZÓN, EN EL DE MI FAMILIA Y EN EL DE TAAAAANTA GENTE QUE TE QUIERE.
Gracias por confiar en mí, por enseñarme, por escucharme, por ese canto bajito a las mañanas al llegar a la radio, por esos abrazos interminables cuando te contaba mis pesares y vos los tuyos, siempre con la palabra justa, generoso como pocos , MAESTRO COMO NINGUNO PORQUE TENGO EL HONOR DE DECIR QUE TRABAJE CON Y PARA VOS.
Si me constará que fuiste una persona generosa si hace muy muy poco y ya estando con tu quebranto de salud, me preguntaste ” Sandrita, y tus Problemas Judiciales Cómo van? Y Gladys ( mi mamá) cómo anda?
Una de tus taaaantas frases, ” Haya Paz”, y la tengo, porque te fuiste sabiendo que la justicia del hombre ya había fallado a favor de nuestro ” angelito”, y algún día fallará la justicia divina…
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